sábado, 6 de diciembre de 2014

PLAN DE CONVICENCIA





Aquí os dejo una propuesta que se podría incluir en un Plan de Convivencia para favorecer un clima óptimo en el aula:



Mediante sesiones tutoriales, al principio y a lo largo de curso, en las que se explica y se proponen voluntarios, se crea una Red de Compañeros Ayudantes formada por alumnos (2 ó 3 por aula) de todos los cursos, éstos reciben un cursillo de formación sobre convivencia en el aula en la que aparte de los tutores participaría el orientador/a del centro.

Sus funciones serían:

• Fomentar la prevención de conflictos en sus aulas, detectarlos y ayudar a resolverlos realizando mediaciones espontáneas.

• Fomentar la integración de compañeros aislados, invitándolos a participar en grupos, iniciando conversaciones, acompañándolos en recreos…

• Ofrecerse a escuchar a compañeros con problemas y ayudarles a analizar posibles soluciones.

• Mediar en conflictos de aula.

• Colaborar en la acogida de alumnos recién llegados, acompañándolos, informándoles, apoyándolos.

• Escuchando a otros que lo están pasando mal.

• Siendo portavoces entre el grupo y el profesorado.

• Buscando ayuda del Equipo de Convivencia cuando no puedan o no sepan cómo actuar.

• Ayudar a compañeros que lo necesiten (dudas, problemas, tareas concretas,
trabajos, etc.).

También se animaría a las familias para que sus hijos participen en los diferentes equipos de Red de Ayudantes, Mediación, etc. ya que quienes lo hacen suelen aprender recursos y habilidades que les ayudan a afrontar mejor los conflictos.

Esta propuesta ayudaría a los docentes, y al centro en general, a conocer con mayor profundidad los problemas cotidianos en las aulas y a contar con la ayuda de alumnos que participan en el grupo de iguales.


Aquí os dejo un esquema de un plan de prevención y tratamiento de conflictos que muestra muchos de los aspectos a tener en cuenta en el Plan de Convivencia:



miércoles, 3 de diciembre de 2014

¿ES LO MISMO UNA ORGANIZACIÓN EDUCATIVA QUE UNA ORGANIZACIÓN EMPRESARIAL?








  • En los últimos años se ha generalizado la idea de que las organizaciones educativas deben funcionar como empresas y los directores tener un perfil de empresarios para que aquellas sean competitivas, productivas, eficaces y eficientes y logren sobrevivir.
  • Las organizaciones educativas, universidades y colegios de hoy día, se están interesando más por ser empresas y descuidan o se olvidan de la finalidad educativa, su función específica.
  • Existe un interés más centrado en el beneficio económico y en impulsar estrategias para lograr este propósito a corto plazo, que en la persona y en los objetivos de largo plazo; se le está dando más primacía a lo primero y se está desplazando y perdiendo el interés por lo segundo.
  • La mayoría de las aplicaciones implementadas en la organización educativa provienen de la organización empresarial, y se han realizado más desde un razonamiento teórico y técnico que desde un razonamiento práctico.
  • Existe una tendencia a evaluar la gestión escolar y universitaria a partir de criterios de excelencia de las empresas.
  • Las instituciones educativas se están interesando más por producir que por formar, lo que desvirtúa su naturaleza educativa al orientar su quehacer solamente por resultados.
  • Existe una tensión permanente en las instituciones educativas entre lo pedagógico y lo administrativo, el ideario y la supervivencia, la formación y los rendimientos, el mercado y la academia.

¿Le conviene a la institución educativa seguir extrapolando los modelos de gestión empresarial para evaluar la calidad y para cumplir su finalidad educativa?; ¿por qué las instituciones educativas están más preocupadas por buscar modelos que les permitan ser productivas y autosuficientes, que por buscar modelos que aseguren el éxito de su misión de educar?